QUÉ TRABAJAMOS
LENGUAJE ESCRITO
El lenguaje escrito es muy importante en el desarrollo personal pero, sobre todo, la correcta adquisición del proceso lecto-escritor es la base fundamental de los aprendizajes escolares. Primero aprendemos a leer, después leemos para aprender.
Lectura.
Escritura.
Comprensión lectora.
Ortografía.
Expresión escrita.
Cómo saber si nuestro hijo/a puede tener un problema en lectura y/o escritura.
Los signos más habituales que nos pueden indicar que es necesario consultar con un especialista son los siguientes:
* Lee muy despacio.
* Se “inventa” palabras.
* Se “come” letras, sílabas o palabras.
* Se salta de renglón.
* Cambia letras o sílabas de sitio, por ejemplo: lee lago en lugar de algo o dargón en lugar de dragón.
* Silabea, es decir; lee por sílabas en lugar de leer por palabras.
* Muestra signos de tensión al leer: tensión muscular, frotarse las manos, movimientos repetitivos con el pelo, con las manos, tics, etc.
* Anticipa la lectura posterior; es decir, intenta ir leyendo mentalmente o muy bajito la lectura que tendrá que leer después para “ensayarla” y leerla mejor.
* No le gusta leer, en ocasiones rechaza la lectura.
* No entiende lo que lee.
* Lee sin apenas entonación, como un robot.
* Se “come” letras, sílabas o palabras.
* Añade letras sílabas o palabras, por ejemplo; palanta en lugar de planta.
* Une palabras.
* Separa palabras de forma incorrecta.
* Cambia letras, sílabas o palabras; por ejemplo: oscoro en lugar de oscuro.
* Tiene muchas faltas de ortografía y casi todas son muy visuales, “que hacen daño a la vista”.
* Comete errores incluso cuando copia.
* No se entiende lo que escribe.
* Tiene una letra poco proporcionada; unas letras más grandes, otras muy pequeñas.
* Tiene problemas para adecuar el tamaño de la letra al tipo de cuadro que le presenten para escribir.
* Muestra tensión al escribir, las partes del cuerpo implicadas en la escritura están excesivamente rígidas, lo que aumenta la sensación de cansancio y produce dolores musculares.
* Mala sujeción del lápiz o del bolígrafo.
* No le gusta escribir, llega incluso a rechazar la actividad.
* No es capaz de responder correctamente preguntas sobre una lectura.
* Tiene problemas para contar con sus palabras lo que ha leído, repite expresiones literalmente, omite información principal, no sigue un orden lógico en la exposición de los hechos, etc.
* No sabe lo que tiene que hacer en los ejercicios que le ponen, ni en las preguntas de los exámenes.
* Si se le pide que lleve a cabo más de una tarea, no completa el ejercicio, hace solo la/s primeras.
* A veces da la sensación de que no haya leído el enunciado y guíe su actuación por el modelo de ejercicio: “aquí tengo que unir las dos columnas”, “aquí completar el texto”, etc.
* Tiene importantes problemas para resolver los problemas de matemáticas, parece que busca la operación adecuada al azar: “sumar, restar, multiplicar, dividir”.
* No le gusta leer.
* Le cuesta ordenar palabras para formar una frase o completar los huecos en un texto u ordenar párrafos para formar un texto con sentido.
* A veces entienden la información básica (quién, dónde, cuándo, qué, cómo) pero no son capaces de inferir información que no viene en el texto de forma explícita o de establecer relaciones entre las ideas (causa-efecto, condición, etc.) o no entienden el lenguaje figurado (frases hechas, refranes, ironía, sarcasmo, etc.).
* Tiene muchas faltas de ortografía.
* La mayoría de las faltas que tiene son muy visuales, de las que “hacen daño a la vista”; por ejemplo, güevo en lugar de huevo o aver en lugar de haber.
* Tiene muchas faltas incluso cuando está copiando un texto.
* No le sirve de ayuda el escribir la palabra de varias formas para ver cuál le parece mejor, siempre “se la juega” al 50% porque no tiene referencia visual, no le “suena” mejor una que otra, le “suena” igual.
* En un texto puede escribir la misma palabra de tres o cuatro formas distintas (alla, haya, aya, halla).
* Parece que no se fija.
* No es capaz de expresar por escrito lo que quiere contar.
* No corresponde lo que cuenta de forma oral con la exposición escrita del mismo tema.
* No sigue un orden lógico en la exposición de los hechos por lo que al lector le cuesta entender el texto.
* Tiende a omitir información importante, dándola por supuesta.
* Cambia el sujeto de la acción sin marcarlo en el texto con lo que los puntos de referencia para la comprensión del texto se ven muy afectados.
* No utiliza correctamente los nexos, con lo que la relación entre las ideas resulta alterada.
* Utiliza un lenguaje excesivamente sencillo con pocos adjetivos y adverbios y frases simples, o intenta embellecer el texto sin tener el dominio preciso del lenguaje con lo que se obtiene un texto confuso, a veces rocambolesco.
* Los textos presentan falta de coherencia, cohesión y adecuación.
* Suspende exámenes a pesar de que se sabía la materia.
La presencia de estas características da lugar a diferentes dificultades de aprendizaje (dislexia, retraso lector, discalculia, disgrafía, disortografía, etc.).